20 noviembre 2010: Japón: adolescencia y lesbianismo platónico

Estos días se estrena en Japón una película de Kotaro Terauchi de lo más sugestiva: Maria-sama ga Miteru (マリア様がみてる: La Virgen María te está mirando). El film da pistas interesantes sobre la evolución de la adolescencia japonesa contemporánea: secretismo, cierta indefinición sexual, lesbianismo platónico. Tres dimensiones que mantienen un estrecho contacto.

La película airea un asunto que suele moverse entre bambalinas. De lo que habla no constituye novedad: cuenta coqueteos entre jovencitas que pasan el día juntas en una institución tan cerrada como una escuela femenina católica. Hasta ahora se trataba de un asunto reservado y gozaba de escasa difusión: algo típico de una sociedad inclinada (hoy, igual que en el pasado) a cultivar compartimientos estancos, sociedades secretas y grupos cooptados de los que, mirando desde fuera, poco o nada se sabe. Ahora el velo se entreabre un poco: el film revela relaciones personales íntimas en una escuela de élite de Tokio. La historia se basa en la novela homónima de Oyuki Kôno, dirigida a un público femenino adolescente. La venta del libro demuestra su éxito: supera cinco millones de ejemplares, además de un manga y un animé que replican la historia original.

Resulta que en un famoso colegio, el Lillian Jogakuen, se entablan relaciones de estrecha "fraternidad" entre las alumnas, con "hermanas mayores" que enseñan a las "menores" las reglas escolares y les brindan consejo sobre asuntos diversos, curriculares o no. La recién llegada Yumi Fukuzawa llevaba una vida normal hasta que una estudiante del último año, Shoko Ogasawara, la elige como "hermana menor"…
Novela, manga y animé ponen de manifiesto la siguiente paradoja:
- las niñas (estas, las demás) se vuelven socialmente “japonesas” en/por el hecho de someterse a una pauta de autoridad que, en términos históricos, viene siendo diseñada por manos masculinas;
- sin embargo, el mundo tipo “huerto cerrado y jardín florido” en que se forman unas cuantas como las que aquí se cuentan consigue poner entre paréntesis el componente “genérico” de la autoridad vigente en la sociedad.
A estas pícaras doncellas las vigilan mujeres religiosas absueltas de cualquier expresión de la propia sexualidad, hecho graficado por la estatua de la Virgen que preside el jardín de la institución y funciona como criterio (femenino y doméstico) de autoridad: “la Señora María te está mirando”.

Es a cada una a quien debiera vigilar la blanca mujer de piedra inerte. Pero, al parecer, poco consigue divisar. En realidad, las que miran y escrutan son más bien unas púberes que, de puro entrecruzar encendidas ojeadas, humanizan la piedra, la entibian, le confieren pasión, palpitación bajo uniformes impecables, murmullo en los pasillos silenciosos, en un ambiente cuya excitación ya no busca ocultarse de los ojos (¿distraídos, cómplices?) de sus nada celosas celadoras. En un micro-mundo sin otra mirada masculina que la del viejo jardinero o el ajetreado jefe de cocina, las chicas se (ad)miran fogosamente unas a otras. Intercambian emociones que se insinúan, sin mostrarse del todo, agigantando deseos que se mantienen contenidos en leves roces, abrazos distraídos, arrullos bisbiseados, besuqueos furtivos. El contacto físico de este incesante flirt se resuelve en amague. Por lo que la atracción se intensifica proporcionalmente, idealizando la relación afectiva hasta el paroxismo. Como si ellas mismas fueran personajes de un manga platónico capaz de hacer soñar a otras lectoras mientras viajan en tren.

El juego es urticante. Pero el agua nunca llega al río. A lo más, deja para el hogar el consuelo nocturno de alguna masturbación. Lesbianismo es palabra tabú en Japón. No la reconocerían chicas como estas ya que, al fin y al cabo, en su escuela se preparan para entrar a un mercado matrimonial de signo igualmente elitista. Con suerte (al menos para sus padres y madres) acabarán emparejándose con chicos de la cercana (e igualmente clausurada) escuela Hanadera, oculta detrás de la colina y tapiada (por ahora) por el juego filo-homo-sexual de unas niñas bonitas que sueñan sueños que tal vez se aletarguen nada más obtener su diploma secundario.

Web: http://www.mariasama-movie.jp/